miércoles, 4 de noviembre de 2009

"Flash Back" al Destino

Bajo las hélices de lo que sea que eleva se intenta volver a un estilo perdido hace algunos años. Dejar atrás la primera persona (el yo) y dar la bienvenida a lo indefinido para que quien lo quiera lo tome como suyo. Volver entonces a lo antiguo que caracterizaba un estilo sin dejar a un lado lo nuevo. Palabras claves como pérfida, cigarro, cenizas, estoico, humo e incluso "agú" que entre prácticas periodísticas se pierden para elevar la claridad, consecuencia y síntesis; dejando en claro que aún no existe el título que determina qué es el oficio o profesión. ¡Que viva el mareo literario!
Subyugado entonces a añorar antiguas palabras no les queda más destino que regresar, como un hermano después de 15 años. Entonces la promesa tácita invertida en estas letras se cumplirá, pues el recordar y recuperar lo que aparentemente se perdió no es retroceder sino renovar.

Miltrox.

martes, 27 de octubre de 2009

Mi Ontología

Soñé que desperteaba junto a ti.
Soñé que seguía haciéndote reír.
Soñé que te quería y tú a mi.
Soñé que podía mantenerme despierto viéndote dormir.
Soñé que me extrañabas.
Soñé que me buscabas.
Soñé que me daba cuenta de tu cariño.
Soñé que siempre te veía como si fuera la primera vez.
Soñé que no te miraba, te admiraba.
Soñé que escribía una cursilería sólo por pensar en ti.
Entonces me di cuenta que estaba despierto y tú dormías.

Miltrox.

martes, 28 de julio de 2009

Temo

¿Soy lo que quieres o lo que quieres querer?, o sólo tengo la misión de apagar por momentos tu soledad.

Temo no ser lo que esperas, temo ser más que eso y ahogarte, temo también ser menos y no merecerte. Pero lo que más temo es lo que guardas, dice más que todo pero sin detalles, como un mal resumen tuyo. Algo así como hablar de tu sonrisa sin haber sufrido el azote de tus lágrimas; o escribir de tu piel sin haberla sentido sudar en mis manos.

He perdido toda cordura y me he dividido en cuatro. Tres de esas partes eres tú, y la que queda depende de ti.

¿Eres lo que quiero o lo que quiero querer?, o sólo tienes la misión de hacerme sentir útil.

No le temes a nada respecto a mí, tal vez porque no soy suficiente. Temo a la vulnerabilidad de quererte. Es que hacerlo no es difícil a pesar de lo que crees, sólo es más fácil temerte.

Más que mal tres cuartas partes mías eres tú y la otra depende de ti.